Mi más enérgica repulsa hacia los responsables de la monstruosa matanza a tiros de la colonia de cabras perpetrada en es Vedrà, Ibiza, el pasado 4 de febrero. Me horroriza constatar cómo determinados representates de nuestra sociedad llegan a extremos tan demenciales.
Testimonio de la atrocidad, recogida en el periódico de Ibiza:
«Lo que vi ayer, os puedo asegurar que tardaré tiempo en olvidarlo. Con unos amigos fuimos a pescar por la mañana por la zona de Cala D´Hort.No teníamos ni idea de la matanza que de la que íbamos a ser testigos. No sé qué hora sería pero empezamos a oír tiros y nos dimos cuenta de que venían de la impresionante zona de Es Vedrá. Nos acercamos con la barca y vimos lo que estaba pasando. Yo llegué a ver a cuatro personas con armas. En principio estuve a punto de llamar a la policía, pensé que eran unos locos .Luego unos de nosotros comento que podía ser lo que salió en la prensa sobre las cabras. Os puedo asegurar que los desgarradores alaridos de muerte se oían a muchísima distancia. Nos acercamos lo suficiente para ver una cabra cerca de una cría pequeña, que se movía convulsionando sin toda la parte del lomo .Sangre?, por todas partes. Como berreaban los pobres bichos. Una matanza. La verdad, creo que tendrían que haber buscado otra solución… Lo de ayer fue de vergüenza».